¿Sabías que el Gigante de Cardiff fue uno de los engaños más famosos de Estados Unidos en el siglo XIX? En 1869, se "descubrió" en Cardiff, Nueva York, una figura petrificada de un hombre de 3 metros de altura. Atrajo multitudes y generó debates sobre gigantes bíblicos. Finalmente, se reveló que era una estatua de yeso creada por un tabaquero llamado George Hull para burlarse de fundamentalistas religiosos y, de paso, ganar dinero con la exhibición.